Su vida


Periodista latinoamericano nacido en El Salvador el 20 de abril de 1928 y fallecido en México el 22 de octubre de 1978.

En El Salvador se hizo maestro normalista y formó parte, junto con Roque Dalton, Otto René Castillo, Ricardo Bogrand, Manlio Argueta y otros autores, la Generación Comprometida.

Vivió el exilio en Guatemala donde colaboró con Jacobo Árbenz y participó en la resistencia armada contra Carlos Castillo Armas y de ahí tuvo que salir a su otro exilio: México.

Ya en México, donde estudió letras con Rosario Castellanos y Jaime Sabines, fue reprimido como periodista al defender la huelga del entonces periódico Zócalo.

René Arteaga colaboró en varios medios informativos como Excélsior, El Popular, Notitrece, entre otros y fue fundador de El Día, de la edición vespertina de El Diario de México y de la cooperativa Uno más Uno, donde escribió hasta el momento de su muerte.

Al final de sus días también fue catedrático de periodismo en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Despedida de Pedro Ocampo Ramírez a René Arteaga, a quien refería como un periodista "armado de anécdotas tan reales que parecían inverosímiles, de frases hechas para dejar deshechos los lugares comunes".



Un adiós a René Arteaga

Pedro Ocampo Ramírez

Porque quiso y pudo hacerlo, René Arteaga, hijo de Josefina Rebollo como se complacía en puntualizar, salvadoreño y ciudadano militante del Tercer Mundo, decidió fabricar su propia leyenda para instalarse en ella. No lo hizo para sobrevivir si no para vivir. Para envolver entre algodones de buen humor, una vida golpeada por la vida o por los dispensadores de la vida y la muerte en esta sociedad injusta en la que y contra la que le tocó batallar. Y así, armado de anécdotas tan reales que parecían inverosímiles, de frases hechas para dejar deshechos los lugares comunes, René Arteaga Rebollo vivió y bebió su vida combatiente sin aflojar jamás, sin rajarse, padeciendo el exilio de El Salvador en México y de México en cualquier lugar a donde lo arrojaran los requerimientos del oficio.




Dicen que en algún mural Diego Rivera lo tomó de modelo para pintar a un hombre niño, un revolucionario adolescente que se iniciaba en una tarea –el reparto de volantes- calificada ya como subversiva. Y dicen también que, entrenado para las penurias en las huelgas de hambre en que participó como estudiante normalista en su país de origen, no tuvo que apretarse tanto el cinturón cuando el hambre le llegó como consecuencia de otra huelga: la que él y los del incipiente sindicato de redactores perdieron frente a la empresa de Zócalo. Casi fakir en esos menesteres de vivir sin comer, René comenzó a peregrinar por los diarios y así lo conocí –egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM- en las aventuras y desventuras del quehacer periodístico. Recorrió las redacciones, coincidimos en algunas y juntos tuvimos una experiencia que nos dejó un mal sabor en los medios de comunicación. Pero ese es otro cantar.

 Lo que quería decir es que este principio de semana y estos finales de año comienzan mal con la partida de René Arteaga Rebollo. Nos había mal acostumbrado a su buena plática, a su obsesión contra las dictaduras que ensombrecen la vida de América Latina, a su diaria tarea de hormiga revolucionaria empeñada en resolver lo pequeños y al mismo tiempo vitales problemas de los desvalidos. Gestor de tiempo completo, -y eso creo que sólo lo saben los interesados- René tocaba timbres, hacía antesalas, jalaba a la gente por la manga del saco, le telefoneaba a las horas más desacostumbradas y conseguía siempre una beca por ahí, una pequeña chamba por allá, para aquellos que se le acercaban con cara de está llevando la trampa.

Ahora lo extrañaremos mucho. Nos vamos haciendo viejos y nos vamos quedando solos. Y será triste entrar a la redacción y no verlo, el saco colgado del respaldo de la silla y a René sentado frente a la máquina de escribir, dándole sentido, color y frescura a la noticia.
http://es.scribd.com/doc/180140862/Un-adios-a-Rene-Arteaga
 

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